viernes, 23 de agosto de 2019

[Reseña] La "Divina Comedia", de Dante Alighieri


Imagen de Goodreads

Título: La Divina Comedia 

Título original: La Divina Comedìa (en toscano, no en italiano moderno)

Autor: Dante Alighieri (1265-1321)

Año de publicación: 1555 (sí, muchos años después de su composición)

Traducción: ver esta entrada.

Calificación: 🌟🌟🌟🌟🌟






Me gustó mucho más de lo que esperaba, porque cuando lo empecé creí que me ganaría y lo odiaría. Es una lectura ardua e intensa que merece la pena, siempre y cuando uno esté algo acostumbrado a esta clase de libros. Al empezar a leerlo ya induce a pensar que no será fácil, que hay detalles que uno lee y pierde al mismo tiempo y que Dante Alighieri no tenía ganas de que entendiéramos ni un pedacito del libro. Pero poder, se puede. 

Dante se construye como protagonista en este recorrido por el Infierno, el Purgatorio y el Paraíso. El motivo por el cual está en el umbral (no es el “umbral”, sólo lo uso a modo ilustrativo) del Infierno abre interpretaciones y hay que buscarlo en su biografía real, aunque dentro del libro se desliza varias veces. Y Virgilio, el autor de La Eneida, es quien aparece para guiarlo (enviado por Beatriz, personaje que particularmente me encanta). Los tres lugares tienen estructuras propias en donde hay personas cumpliendo con su condena o con su premio (otra vez hago un uso ilustrativo, es un poco más complejo de explicar). Dante erige la biografía de varias de ellas, hayan sido contemporáneas a él o no.

Si ya se me hizo difícil intentar reponer el argumento de una forma sencilla pero un poco más detallada que la que se podría hallar en alguna contratapa, hablar de qué me gustó (y qué no) es una tarea aparte. Me fascinó bastante la idea de contar la vida de otros (y, en varias ocasiones, dejar que la cuenten con una voz propia) desde una perspectiva tan personal, al punto de incurrir en ciertos errores en el intento. Alighieri se puso en un lugar bastante elevado para discernir, desde su punto de vista, quién va a dónde, en una suerte de clasificación subjetiva. Es muy interesante recorrer las biografías e intentar descubrir (o, al menos, tratar de esclarecer un poco) la razón de sus decisiones, aunque muchas veces el mismo personaje se encargue de aclararlo. Me sorprendieron las denuncias a la corrupción de la Iglesia y del poder. Italia, en los tiempos en los que Alighieri vivió, era bastante tormentosa. Alighieri siempre tiene la vista en su Florencia y mantiene una relación de amor-odio con esa ciudad, así que también la menciona.

Ilustración de Gustave Doré
Dante, Virgilio y Beatriz son los personajes que más se desarrollan en la Comedia. Lo curioso es que los tres fueron reales (bueno, quizá la existencia de Beatriz se haya puesto en duda más de una vez): uno de ellos es una representación del libro, el otro es un poeta latino a quien Alighieri admiraba y Beatriz era el amor de su vida, idealizado a la quinta potencia. Una locura. Lejos de asemejarse a los libros plagados de personajes que no tienen ninguna función aparente, estos tres simbolizan distintas cosas e intervienen bastante, incluso cuando los cantos parecen estar protagonizados por otros. 

En cuanto a la escritura, Alighieri es muy poético (de hecho, él es parte de una escuela poética, con características particulares), cada canto tiene un tono distinto. Algunos son horrorosos por la clase de condena que describe y otros, como los del Paraíso, están cargados de luz. Los simbolismos son habituales y hay una gran cantidad de referencias religiosas. Por suerte, existen las ediciones anotadas. Son tan molestas como necesarias. Si no fuera por ellas, también pasarían desapercibidas las referencias a hechos de público conocimiento en el 1300, así que uno termina aprendiendo algo de Historia en el camino. Nada que no pueda investigarse, mucho más con Internet a mano, pero requeriría un tiempo considerable hacerlo con cada dato nuevo. Eso es lo único malo: que Alighieri da cosas como sabidas, pero no es así. Si bien uno podría leer los versos e igual comprender el libro, no sería una lectura profunda. Si es para entretenimiento, tal vez el lector no se haga problema, pero si existen otros fines La Divina Comedia se vuelve todo un desafío rodeado de otros libros inspiradores y de alegorías que surgen de la propia sabiduría del autor. 

Se nota muchísimo que Alighieri le dedicó mucha energía (y talento, por supuesto) a este poema. Por eso es imposible entenderlo o captar todos los detalles en su totalidad con una sola lectura (al menos, esa es la impresión que me causó). Más allá de los obstáculos, es un gran libro y tiene pasajes e historias muy bellos, además de interesantes. Es una de las lecturas “pesadas” que más disfruté. A grandes rasgos, eso es lo que puedo decir del libro… aunque al cerrarlo una se quede sin palabras. 

¡Espero que les haya servido! Y que tengan buen fin de semana.