viernes, 28 de septiembre de 2018

"Sueños de dioses y monstruos", de Laini Taylor (Hija de humo y hueso #3)


Título: Sueños de dioses y monstruos

Título original: Dreams of Gods and Monsters

Serie: Hija de humo y hueso (Daughter of Smoke and Bone)

Autor: Laini Taylor (1971)

Año de publicación: 2014

Traducción: Monserrat Nieto

Calificación: 🌟🌟🌟🌟

Composición de la serie:

1) Hija de humo y hueso

2) Días de sangre y resplandor 

3) Sueños de dioses y monstruos 

Spin off: Night of Cake & Puppets (#2.5)


Aviso: cierta información de la reseña puede ser spoiler si no leyeron los libros anteriores. Los de este libro están ocultos y pido perdón por la cantidad de espacios en blanco XD

Me resulta imposible no sentir cierta tristeza al terminar la trilogía. No he leído mucho de este género, pero me atrevo a decir que es una de las mejores novelas de esta clase. Y gran parte de ello se debe a que está muy bien escrita (el estilo puede gustar o no, pero mal no está) y que tiene una historia que, si bien suena conocida, no se desarrolla de la manera más predecible, al menos no hasta el final. Tampoco roba mundos, si no que asienta una construcción de los mismos. Sueños de…  es un cierre que me dejó una sensación algo tibia, independientemente de la melancolía, y que cae en algunos errores típicos de los finales de algunas sagas. Tal vez yo sea demasiado quisquillosa, pero me pareció que era un libro radicalmente diferente a los anteriores. En la reseña de Días de sangre… yo sostuve que Taylor entretejía historias y que las perspectivas de los personajes secundarios eran tan fundamentales como las de los protagonistas. En este caso, me costó mucho diferenciar entre la funcionalidad y el relleno. Es un 3 con 1 estrella más porque me encanta esta saga.

Karou y Akiva están tratando de conseguir que quimeras y ángeles se unan para derrotar a Jael, que después de llegar a la Tierra con su ejército de Dominantes tiene un plan tan macabro como ridículo entre manos. Karou sigue con el engaño de la existencia del Lobo Blanco, ayudada por Ziri, quien tendrá más relevancia en la trama. Mientras tanto, el libro empieza presentándonos a un personaje femenino nuevo, Eliza, una joven científica que sufre pesadillas extrañas.

Por supuesto, la primera pregunta que surge en la cabeza del lector es “¿cuál es la relación entre A y B?”, pero es algo que se desarrollará de a poco, con la dosificación característica de la información que maneja Taylor. Sin embargo, esto no será siempre así. Aquello que se desliza a cuentagotas SPOILER (como la historia de los stelians y su misión) FIN DEL SPOILER en el libro termina colisionando en el final. Para mí, es el síndrome de las telenovelas. Y el choque es abrupto, porque hay que asimilar mucho en poco tiempo y eso no es algo que me convenza demasiado en una trilogía. Se podría haber empezado desde el principio con ciertas cuestiones que explotan en Sueños de…  y, de hecho, mucho de lo que se menciona al pasar vuelve a aparecer para tomar fuerza. El resto, todavía lo sigo buscando. Durante la mitad de mi tiempo de lectura me encontré más concentrada en recordar detalles de los dos libros anteriores que en apreciar los de este. El desvío de la atención no es uno de mis ejercicios favoritos.

Uno de los puntos fuertes de esta saga son los personajes y eso se mantuvo. Hubiera preferido que no se borrara tanto a los protagonistas, a pesar de que cuando la narración se centra en ellos se vuelve melosa. Si bien Akiva tuvo un buen desarrollo y planteaba dudas, Karou siguió siendo la del libro pasado pero un poco más transparente. Salía de las sombras para hablar de amor y más amor, pero en lo referente a otras cuestiones, me pareció hasta innecesaria. Los personajes secundarios tienen sus capítulos propios y se los merecen, porque le dan dinamismo a la historia cuando está demasiado inclinada hacia la relación entre los protagonistas. Zuzana y Mik son geniales (aunque ella sigue cayéndome pesada…) y divierte que sean tan humanos entre ángeles y quimeras. Liraz sale de su rol como “hermana de Akiva” para ser simplemente “Liraz” y toma mucha fuerza. Y Ziri necesita urgentemente un  spin off . Porque sí.

Extrañé bastante la atmósfera mágica y oscura del primer libro. En este se desencadena una guerra y no parece tal. SPOILER No muere nadie y es demasiado afortunada para mi gusto… o tal vez estoy acostumbrada a que la realidad sea mucho peor. FIN DEL SPOILER La crueldad de Días de sangre…  aparece por destellos (o tal vez se haya transformado en otro tipo de crueldad, como la que practica Morgan Toth). Extrañé las locaciones y la separación del mundo humano con Eretz. SPOILER (Roma no fue lo mismo que Praga: cuando leí que los ángeles fueron al Vaticano casi me agarra un ataque. Entiendo que las referencias religiosas estén hasta en algunos nombres que se usan en toda la trilogía, pero me gustaba que se mantuvieran en la distancia, al igual que la ciencia) FIN DEL SPOILER No me pude quitar la sensación de que algo se estaba perdiendo por el camino, además de acordarme de la siguiente escena en algunos puntos, jeje:


Los amaré por siempre


Para cerrar, me encantó el universo que se plantea SPOILER me refiero a la historia de Meliz y todos los demás mundos FIN DEL SPOILER y, a pesar de estar insatisfecha con algunas respuestas, la ejecución me pareció bellísima. Muchas de las historias de personajes secundarios lograron emocionarme doblemente: por los hechos y por las palabras.  SPOILER Si imaginan que me refiero a la relación entre Ziri y Liraz, están en lo cierto. FIN DEL SPOILER Taylor no sólo busca la manera más ilustrativa de hacerse entender, sino que también toma en cuenta quién está actuando para adaptarla a su personalidad, por más que no use la primera persona. Así que sigo fascinada con la forma de escribir y la imaginación (bueno, o la capacidad de tomar elementos y “pegarlos” con ella) de esta autora. Tiene una identidad.

Sueños de dioses y monstruos no es el mega cierre de la saga que tanto estaba esperando, pero tampoco fue una completa decepción. Sostengo que es una de las mejores sagas que leí (si llegué hasta el final, fue por algo) y puedo decir con orgullo que no debo lamentar ni la pérdida de tiempo ni la extinción de mis neuronas (si es que tengo). Espero poder leer pronto El soñador desconocido y ver hacia donde me lleva.

¡Que tengan buen fin de semana!